Cortaron sin plazos el tránsito por el tramo de la Ruta 7 que atraviesa la laguna La Picasa
Lo decidió Vialidad Nacional, debido a la altura del agua respecto del pavimento. El oleaje pone en peligro la calzada y la circulación.
La laguna La Picasa crece un centímetro cada cuatro días y además en la zona, desde el viernes pasado, llueve todos los días entre 20 y 60 milímetros. La cota del pavimento es de 104.47 metros sobre el nivel del mar, en tanto que la de la laguna es de 104.38, por lo que las olas que golpean sobre el pedraplén son de 60, 80 y hasta un metro de altura". Así describió el productor de la localidad de Amenábar, Angel Borello, las condiciones que llevaron a la Dirección Nacional de Vialidad (DNV) a clausurar totalmente, y por tiempo indeterminado, la circulación sobre la Ruta nacional 7, en el tramo entre los kilómetros 369 y 423 que pasan sobre la laguna, informó La Capital.
El ministerio del Interior nacional confirmó la veda total al tránsito a la altura de la laguna, debido a las pésimas condiciones climáticas que alteraron el caudal.
Desvíos
Quienes se dirigen a la zona cuyana desde Buenos Aires deben efectuar un extenso desvío por la ruta provincial 14, a la altura de Diego de Alvear, hasta tomar la ruta 8 hacia el oeste y luego la 33 hacia el sur hasta Rufino, donde retoman la 7.
El mismo recorrido a la inversa deben efectuar quienes van hacia Buenos Aires por Ruta 7, tomando la ruta 33 hacia la izquierda en la rotonda de Rufino, hasta alcanzar el cruce con la nacional 8. Luego dirigirse por ésta hacia el este hasta el cruce con la provincial 14 hacia el sur hasta retomar a la izquierda la ruta 7 hacia el este.
Además, señalaron desde Vialidad Nacional que se realizan obras de protección del talud con la colocación de piedras para reconstituir el cuerpo del terraplén y resguardar la integridad de la calzada.
Borello dialogó con LaCapital en su condición de representante por el distrito Amenábar en el Comité de Cuenca de la Laguna La Picasa y destacó como se ha multiplicado el tránsito en su zona: "Yo vivo en el kilómetro 570 de la Ruta nacional 33. Por el desvío ahora mismo estoy viendo un tránsito tal de camiones, que la ruta parece la avenida Godoy de Rosario. Hace algunos días se había establecido el sistema de tránsito asistido por la ruta 7, pero el oleaje que arrastra piedras sobre el pavimento, las lluvias y el barro hacen muy peligrosa la circulación; incluso hay partes donde desaparecieron los guardarrails", indicó.
Planteo y solución
En materia de soluciones, Borello planteó la paradoja de que la llamada "estación alternativa Sur" funciona mal; "está incompleta y mal hecha, ya que aporta a la laguna 20 metros cúbicos por segundo (mcps), y sólo se desprende de 5 ó 6 mcps", indicó.
Recordó luego Borello que la verdadera solución pasaría por la realizacion de un canal por gravedad de siete kilómetros que lleve el agua de la laguna La Picasa —en una cota de 104.38—, a la laguna Martín García ubicada al sur y en una cota de 102 metros, aunque para eso se deba atravesar una loma cuya cota es de 106 metros.
El productor, que además se desempeña como cooordinador de Asuntos Hídricos de la Confederación de Asociaciones Rurales de Santa Fe (Carsfe), recordó que una primera alternativa de construir el canal se frustró por la negativa de los propietarios de la estancia El Carmen —la familia Pérez Companc— a ceder los terrenos para el canal. La otra frustración llegó con la adquisición durante el gobierno de Carlos Reutemann, de cuatro bombas extractoras de tal potencia que para ponerlas en funcionamiento se requería de toda la energía de dos localidades de la zona como Christophersen o Diego de Alvear.
La solución pasaría por un canal por gravedad de 7 kilómetros que lleve el agua de La Picasa a la laguna Martín García.